Pregunta
¿Qué es el Cristianismo Muscular?
Respuesta
El Cristianismo Muscular es una práctica "masculina" del cristianismo que enfatiza la salud, la condición física, la moralidad, así como el compromiso con Cristo. El Cristianismo Muscular comenzó en la Inglaterra victoriana y tuvo una gran influencia en los Estados Unidos durante el siglo XIX.
El término Cristianismo Muscular se originó en una reseña escrita por T. C. Sanders del novelista inglés Charles Kingsley y su obra Two Years Ago (en español, "Hace dos años") en 1857. Kingsley fue uno de los varios pensadores que promovían la idea de una expresión masculina del cristianismo, que daría como resultado lo que Sanders describió en la Saturday Review como "un hombre que teme a Dios y puede caminar mil millas en mil horas—que respira el aire libre de Dios sobre la rica tierra de Dios, y al mismo tiempo puede golpear un faisán, medicar a un caballo y torcer un atizador alrededor de su dedo".
El Cristianismo Muscular, una filosofía que enfatizaba el esfuerzo físico, la virilidad, el patriotismo, los deportes y el aire libre, ganó popularidad en América durante el Gran Avivamiento de 1857-58. Esta expresión masculina del cristianismo se consideraba especialmente importante en una iglesia americana que, en ese momento, estaba compuesta por dos tercios de mujeres. En un esfuerzo por combatir la "feminización" del cristianismo, se organizaban clubes y reuniones de oración en espacios dominados por hombres, enfatizando las actividades masculinas junto con ideales de patriotismo, destino manifiesto y el campo misionero mundial. Los inicios de la YMCA en 1844 estuvieron vinculados al movimiento del Cristianismo Muscular.
Las ideas del Cristianismo Muscular florecieron especialmente en el ámbito deportivo. A finales del siglo XIX, Theodore Roosevelt abogó por la importancia del fútbol americano cuando este enfrentaba controversias debido al alto número de muertes de jugadores. "El juego rudo, si se limita a los límites honorables y masculinos, es una ventaja", escribió en una carta en 1895. Otros estuvieron de acuerdo—se sentía que la competencia atlética, especialmente la que implicaba algo de riesgo, evitaba la "debilidad" y era útil para formar características positivas de carácter.
Quedan vestigios del Cristianismo Muscular. En los siglos XX y XXI, han surgido o continúan operando numerosas organizaciones como Promise Keepers, enfocándose en expresiones de fe centradas en los hombres. Aunque el énfasis en masculinizar el cristianismo ha disminuido desde el siglo XIX, el legado del movimiento de Cristianismo Muscular ha contribuido a estudios bíblicos específicos para hombres, ministerios masculinos y libros como Salvaje de corazón de John Eldredge.
El movimiento del Cristianismo Muscular explora aspectos importantes de lo que significa seguir a Cristo como hombre. Sin embargo, más de 150 años después, a pesar de las parrilladas, los partidos de fútbol, los viajes de camping y las batallas de paintball, las iglesias aún luchan por conectar con los hombres.
La Escritura no exige que los hombres sean físicamente fuertes o se ajusten a la percepción social de la conducta masculina ideal. Se nos llama a ser más como Jesús (Efesios 5:1–2).
Si bien debemos buscar la piedad en todos los aspectos de la vida y buscar la mejor manera de glorificar a Dios con nuestros cuerpos, intereses, género y habilidades, el cristianismo es, en última instancia, una conformidad con la persona de Cristo, nuestro Salvador sin pecado.
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