Pregunta
¿Cuál es el significado del sueño de Nabucodonosor en Daniel 2?
Respuesta
En ciertos momentos, Dios ha utilizado los sueños para comunicarse con la gente. Una de esas personas fue el rey Nabucodonosor de Babilonia. Daniel 2 cuenta cómo Daniel interpretó el sueño de Nabucodonosor, en el que Dios le proporcionaba una visión general de los acontecimientos mundiales en los milenios venideros.
Antecedentes de los personajes
El rey Nabucodonosor reinó entre los años 605 y 562 a.C., expandiendo enormemente el Imperio Babilónico, conquistando Jerusalén y deportando a los judíos en el proceso. Daniel fue uno de los deportados de Israel y se le concedió una educación en el palacio del rey. Cuando Dios concedió a Daniel la sabiduría necesaria para interpretar el sueño del rey, se inició la larga carrera de Daniel como dirigente político, consejero de confianza y profeta bien conocido.
La amenaza de Nabucodonosor
Una noche, Nabucodonosor se despertó asustado por un sueño. El rey llamó a sus magos para que interpretaran la pesadilla. Este era el procedimiento habitual en una cultura que concedía gran importancia a los sueños y a su significado. Sin embargo, añadió un requisito sin precedentes: "Dime cuál ha sido mi sueño e interprétalo" (Daniel 2:5). Así pues, los sabios reales no solo tenían que proporcionar la interpretación del sueño, sino que debían relatar el sueño mismo. La pena por el fracaso era la muerte: todos los magos, encantadores, hechiceros y astrólogos del reino serían ejecutados. Los magos, preocupados, respondieron: "Lo que el rey demanda es difícil y no hay nadie que lo pueda declarar al rey sino los dioses cuya morada no está entre los hombres" (Daniel 2:11). Cuando Daniel se enteró de esto, estaba decidido a demostrar al rey el poder de Dios (Daniel 2:18).
La respuesta de Daniel: El sueño
Daniel pidió al rey algún tiempo para descubrir el sueño, y luego procedió a orar toda la noche con tres de sus compañeros de exilio. Dios le reveló el sueño, y Daniel y sus amigos alabaron a Dios (Daniel 2:19-23). A la mañana siguiente, fue a ver al rey y le contó el sueño.
En el sueño aparecía una enorme y gloriosa estatua de un hombre. Su cabeza era "de oro puro, su pecho y sus brazos de plata, y su vientre y sus muslos de bronce, sus piernas de hierro, sus pies en parte de hierro y en parte de barro" (Daniel 2:32-33). Entonces una roca cortada "sin ayuda de manos" (Daniel 2:34) golpeó el pie de la estatua, y toda la imagen quedó "como el tamo de las eras en verano", mientras que la roca "se convirtió en un gran monte que llenó toda la tierra" (Daniel 2:35). Esta visión, por cierto, nos da nuestro modismo moderno "talón de Aquiles", que significa "una falta o debilidad oculta".
La respuesta de Daniel: La interpretación
La interpretación de Daniel, que le fue dada por Dios, explica que la estatua representa una serie de reinos, cada uno menos glorioso que el anterior, como indica el valor decreciente de los metales. Daniel identifica a Nabucodonosor como la cabeza de oro, afirmando que Dios había dado a Nabucodonosor mucho poder (Daniel 2:37-38). El siguiente reino que surja será inferior a Babilonia, al igual que el siguiente. "Y habrá un cuarto reino, tan fuerte como el hierro. . . . desmenuzará y triturará a todos esto" (Daniel 2:40).
Finalmente, los pies de barro mezclado con hierro "será un reino dividido" (Daniel 2:41). Durante la época de este último imperio mundial, la "roca" los hará pedazos a todos, una predicción de que "Dios . . . levantará un reino que jamás será destruido" (Daniel 2:44). Todos los reinos terrenales anteriores llegarán a su fin.
El sueño más de 2.500 años después
Los cuatro primeros reinos han sido identificados como los imperios babilónico, persa, griego y romano. Esta identificación ha surgido del desarrollo de la historia, que concuerda con otras profecías. Daniel ya dijo que Babilonia, concretamente Nabucodonosor, era la cabeza de oro (Daniel 2:38). Babilonia cayó ante el reino de los medos y los persas (Daniel 5:26-31). Grecia se convirtió en la sucesora del imperio medo-persa (Daniel 8:20-21; 10:20 - 11:14). El imperio "de hierro" solo puede ser Roma.
Las opiniones difieren sobre el quinto imperio. Algunos han intentado identificar diversos periodos de la historia de Europa como los pies de barro y de hierro; otros afirman que los pies representan los restos divididos de Roma antes de ser supuestamente "conquistada" por el cristianismo. Otros creen que el imperio de barro y de hierro está aún por llegar: el reino del Anticristo será un "Imperio Romano resucitado". La última teoría parece ser la mejor. Sabemos, según Apocalipsis 17:12-13, que el Anticristo dirigirá una coalición de diez naciones (¿los diez dedos de la estatua?). Y sabemos que Cristo derrotará a las fuerzas del Anticristo (Apocalipsis 17:14). Después de eso, Jesús establecerá Su reino -la roca aplasta la imagen- y los reinos de este mundo "han venido a ser el reino de nuestro Señor y de Su Cristo. Él reinará por los siglos de los siglos" (Apocalipsis 11:15).
Muchos eruditos han contrastado el sueño de Nabucodonosor en Daniel 2 con la visión de Daniel en el capítulo 7. Ambos pasajes revelan la llegada del reino mundial. Ambos pasajes revelan los reinos mundiales venideros, pero el simbolismo es sorprendentemente diferente en cada uno. El rey pagano ve los reinos de este mundo como una imponente obra de arte, impresionante en tamaño, valor y grandeza (aunque con pies de barro). El profeta de Dios ve los mismos reinos como bestias extrañas y antinaturales, aterradoras en su aspecto y comportamiento. Es una diferencia de perspectiva: donde el hombre ve un majestuoso y reluciente tributo a sí mismo, Dios ve una colección de aberraciones. "No nos hagamos vanagloriosos" (Gálatas 5:26).
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¿Cuál es el significado del sueño de Nabucodonosor en Daniel 2?
