settings icon
share icon
Pregunta

¿Por qué debería una iglesia tener un ministerio de grupos pequeños?

Respuesta


Grupos pequeños, grupos de vida, células, estudios bíblicos—como quieras llamarlos—son una parte importante de muchas iglesias. Algunas iglesias construyen toda su identidad e infraestructura en torno a su ministerio de grupos pequeños. Otras dependen de ellos para su crecimiento. Incluso hay una tendencia creciente que utiliza un modelo ampliado de grupo pequeño como herramienta para plantar iglesias. Pero, ¿cuál debería ser el propósito de un ministerio de grupos pequeños? El mismo que el de la iglesia: hacer discípulos de Cristo y ayudarlos a crecer, reflejando lo que dice Lucas 10:27: "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu fuerza, y con toda tu mente, y a tu prójimo como a ti mismo" (NBLA). Estos dos mandamientos fundamentales destacan tres áreas que forman una base sólida para cualquier iglesia, grupo pequeño o creyente individual: crecimiento espiritual, aprendizaje y servicio.

Amar a Dios con todo nuestro corazón y alma es amarlo con pasión, darle prioridad y confiar en Él. No es fácil mantener esa pasión mientras trabajamos, atendemos a la familia o enfrentamos las exigencias del día a día. Tampoco es sencillo mantener a Dios como nuestra prioridad cuando estamos constantemente rodeados de distracciones: medios, publicidad, el tráfico, el estrés. Y confiar en Él se vuelve más difícil cuando escuchamos las noticias, a los políticos o nos preocupamos por las cuentas. Por eso necesitamos el ejemplo y el ánimo de otros creyentes. Necesitamos personas que nos conozcan y puedan recordarnos como Dios ha sido fiel en el pasado. Un grupo pequeño puede ofrecer todo esto de una manera que una congregación grande no puede.

Amar a Dios con toda nuestra mente implica aprender acerca de Él y ver el mundo desde Su perspectiva. El mejor predicador del mundo sigue limitado por el hecho de que los sermones no permiten interacción. En un grupo pequeño, las personas pueden hacer preguntas, compartir ejemplos, incluso expresar dudas, sabiendo que otros están escuchando. Amar a Dios con la mente significa tomar las verdades bíblicas y aplicarlas a nuestra vida. Aunque un buen predicador añade aplicación a su enseñanza teológica, también es valioso contar con creyentes cercanos que conozcan nuestra situación personal y sepan qué principios de Dios se aplican directamente.

Amarlo con toda nuestra fuerza y amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos están relacionados. Los grupos pequeños deberían ser un espacio donde podamos "amar a nuestro prójimo" libremente, ya sea mediante la oración o al suplir una necesidad física. Pero también ofrecen ánimo y descanso, para que los miembros puedan amar a Dios con todas sus fuerzas fuera del grupo. Ya sea que el grupo se forme alrededor de un equipo ministerial o que sus miembros sirvan a Dios de forma individual, el grupo pequeño puede ser un lugar para recargarse y compartir cómo está obrando Dios.

Dios sabe que somos criaturas frágiles y que necesitamos recordatorios constantes de lo que debemos hacer. Un grupo pequeño es una herramienta clave que ayuda con eso. Reunirse regularmente con un grupo comprometido de creyentes nos permite reforzar lo que creemos, vivirlo, aprender más acerca de Dios y mantenernos fuertes para servir a otros. Las iglesias no deberían tener grupos pequeños solo porque estén de moda o para atraer más gente. Deberían tenerlos solo si realmente son una manera efectiva de formar discípulos de Cristo y ayudarlos a madurar.

English



Retornar a la página inicial de Español

¿Por qué debería una iglesia tener un ministerio de grupos pequeños?
Suscríbete a la

Pregunta de la Semana

Comparte esta página: Facebook icon Twitter icon Pinterest icon YouTube icon Email icon
© Copyright Got Questions Ministries