Pregunta
¿Qué fue la Controversia de las Investiduras y cómo afectó al cristianismo?
Respuesta
La controversia de las investiduras, también llamada disputa de las investiduras, duró desde 1076 hasta 1122 y supuso un desacuerdo sobre el liderazgo de la Iglesia medieval.
En Estados Unidos existe la separación entre Iglesia y Estado. Aunque en épocas más recientes esta "doctrina" se ha corrompido hasta dar a entender que los principios y las organizaciones religiosas no tienen cabida en el debate político/público, la intención original era proteger a la Iglesia del dominio del Estado y evitar que una sola Iglesia obtuviera el control sobre el Gobierno. Los funcionarios políticos no nombran a los funcionarios eclesiásticos, y viceversa. A pesar de las protestas de los progresistas seculares de hoy en día, Estados Unidos nunca ha tenido un problema con la Iglesia y el Estado que se pareciera ni remotamente a la mezcla de Iglesia y Estado de la Edad Media, el tipo de mezcla que los Padres Fundadores esperaban evitar.
En la Europa medieval, sin embargo, el poder religioso y el político estaban completamente mezclados. A partir del siglo IV, muchos cargos eclesiásticos eran nombrados por los gobernantes seculares o propuestos por ellos y luego aprobados o "sellados" por los líderes eclesiásticos. Incluso el papa solía ser nombrado por el rey o el emperador. Las autoridades seculares solían intervenir para resolver las disputas eclesiásticas. En muchos casos, los obispos (que supervisan una diócesis, un gran territorio con muchas parroquias) y los abades (que supervisan un monasterio) eran nombrados directamente por los gobernantes seculares. Estos cargos solían ir acompañados de acceso a tierras y riquezas, y muchas veces el designado era un hijo menor o un pariente del gobernante secular. Los cargos eclesiásticos eran simplemente un favor que el gobernante podía conceder o un puesto que podía vender al mejor postor (alguien que le fuera leal). El proceso de concesión de estos cargos se denomina investidura.
En los siglos XI y XII, algunos líderes de iglesia, así como algunos reformadores, comenzaron a cuestionar la práctica de la investidura. Los líderes de iglesia intentaron afirmar más poder y los gobernantes seculares se opusieron. Algunos nobles se pusieron del lado de la Iglesia, a menudo por razones políticas, ya que querían que las autoridades seculares que los gobernaban tuvieran menos poder. Durante unos 50 años, hubo conflictos armados entre los partidarios del papa y los partidarios del emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. Todas estas disputas y conflictos se conocen como la controversia de las investiduras.
La controversia se resolvió finalmente en 1122 en la Concordia de Worms, donde el emperador Enrique V y el papa Calixto II se comprometieron a que habría una separación entre la autoridad religiosa y la política y que la Iglesia tendría autoridad para nombrar a los funcionarios eclesiásticos.
¿Cómo afectó la controversia de las investiduras al cristianismo?
Como resultado de la Controversia de las Investiduras, el poder de la Iglesia aumentó, al menos en lo que respecta al nombramiento de cargos eclesiásticos, y el poder del emperador del Sacro Imperio Romano Germánico disminuyó. Con un emperador debilitado, los gobernantes locales pudieron ejercer más autoridad en sus propios reinos. Fue esta fragmentación del poder la que, unos 400 años más tarde, contribuyó a la Reforma en Alemania. Martín Lutero fue protegido por Federico III de Sajonia porque el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico no ejercía el control absoluto en Alemania y no podía aplicar el castigo que el papa quería infligir a Lutero. Dado que los gobernantes locales ejercían una autoridad cada vez mayor en sus propios reinos, a algunas partes del Sacro Imperio Romano Germánico les resultó más fácil aceptar la Reforma sin temor a represalias por parte del papa o del emperador.
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