Pregunta
¿Qué significa que "todos nosotros nos descarriamos como ovejas" (Isaías 53:6)?
Respuesta
En medio de uno de los pasajes mesiánicos más hermosos y esperanzadores se encuentra la declaración universalmente condenatoria de que "todos nosotros nos descarriamos como ovejas" (Isaías 53:6, NBLA). Como ovejas, todos nos hemos desviado de nuestro camino en lugar de seguir fielmente a nuestro Pastor. Debido a esa gran deficiencia, necesitamos un Salvador, y por la gracia de Dios, Cristo paga el castigo por nuestro pecado: "el Señor hizo que cayera sobre Él la iniquidad de todos nosotros" (Isaías 53:6, NBLA).
En términos teológicos, la idea de que "todos nosotros nos descarriamos como ovejas" se denomina a veces pecado original. Isaías explica que "todos nosotros somos como el inmundo, y como trapo de inmundicia todas nuestras obras justas" (Isaías 64:6, NBLA). Nadie está exento de la maldición universal de la culpa. Como reitera Pablo: "No hay justo, ni aun uno" (Romanos 3:10, NBLA) y "No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno" (Romanos 3:12, NBLA). Todos son culpables y todos están sin excusa (Romanos 1:20, NBLA).
Aunque Adán y Eva fueron creados a imagen y semejanza de Dios (Génesis 1:26-27, 5:1-2), cuando tuvieron hijos, estos también fueron creados a imagen y semejanza de Adán (Génesis 5:3) y llevaron la mancha y la maldición del pecado de Adán. El pecado y la muerte entraron en el mundo a través de Adán y se extendieron a todos (Romanos 5:12), y debido a su pecado, toda la humanidad está muerta en pecado (Romanos 5:15). No solo estamos todos posicionalmente muertos en pecado (Efesios 2:1-3), sino que también "todos hemos sido como ovejas descarriadas". Todos nos hemos desviado activamente del camino correcto. Todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23).
Pero debido a Su amor por el mundo (Juan 3:16), mientras todos estábamos muertos en pecado (Efesios 2:4-5), Cristo murió en nuestro lugar (1 Corintios 15:3) para pagar el castigo y soportar el juicio por nuestro pecado, para que nosotros no tuviéramos que hacerlo. Podemos recibir ese regalo de Su gracia por la fe (creencia o confianza) en Él (Efesios 2:8-9), y cuando creemos, "nacemos de nuevo" (Juan 3:5-7), somos vivificados (Efesios 2:5), somos hechos nuevas criaturas en Cristo (2 Corintios 5:17) y creados como nuevas personas para las buenas obras que Él preparó de antemano para nosotros (Efesios 2:10). Aunque "todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios", no tenemos que seguir por ese camino de muerte, pecado y vergüenza. Dios nos ha proporcionado un nuevo camino (2 Corintios 5:17) y nos ha dado las herramientas y la fortaleza para caminar en novedad de vida (Romanos 6:4).
Todos nosotros, como ovejas, nos hemos descarriado, pero hemos sido perdonados enormemente. Por esta razón, debemos regocijarnos en la gracia de Dios, agradecidos por Su provisión de perdón y justicia (Colosenses 3:15-17). Como un buen pastor, nuestro Salvador nos ha amado y se ha entregado a sí mismo por nosotros para que podamos vivir (Juan 10:11). Ahora que tenemos una nueva vida, podemos reconocer que nuestras vidas no nos pertenecen (Gálatas 2:20), sino que ahora le pertenecemos a Él: ahora estamos en Él y tenemos todas las bendiciones espirituales en los lugares celestiales en Cristo (Efesios 1:3).
English
¿Qué significa que "todos nosotros nos descarriamos como ovejas" (Isaías 53:6)?
