Pregunta
¿Qué dice la Biblia sobre la kinesiología aplicada?
Respuesta
La kinesiología aplicada, o prueba muscular, es un método desarrollado en 1964 con el fin de diagnosticar afecciones médicas, detectar desequilibrios energéticos, esclarecer deficiencias nutricionales y alergias, y determinar las terapias prescritas. La kinesiología aplicada es una forma de medicina alternativa o naturopática. Según el manual Applied Kinesiology Muscle Response in Diagnostic Therapy and Preventive Medicine (Kinesiología aplicada: respuesta muscular en terapia diagnóstica y medicina preventiva), los profesionales de la kinesiología aplicada afirman evaluar cinco sistemas del cuerpo: el nervioso, el linfático, el vascular, el cerebroespinal y el "meridiano".
El procedimiento diagnóstico principal en la kinesiología aplicada es la prueba muscular. En una sesión típica, se te pide que mantengas el brazo paralelo al suelo para realizar la prueba. Luego, el profesional tira o empuja el brazo hacia abajo mientras comprueba el grado de resistencia muscular, mientras tú sostienes ciertos alimentos, vitaminas, hierbas, suplementos, etc., en la otra mano. Supuestamente, si sostienes o piensas en algo malo o negativo, habrá debilidad en tu brazo y tu resistencia será menor. El brazo se empujará fácilmente hacia abajo o cederá de repente. Por el contrario, si el paciente sostiene o piensa en algo bueno o positivo, la resistencia será mayor porque el paciente es más fuerte mientras sostiene el objeto.
George J. Goodheart inventó la kinesiología aplicada en 1964. Combinó elementos de la filosofía psíquica, el taoísmo chino y antiguas prácticas orientales con la teoría quiropráctica de D. D. Palmer. Combinó el concepto de "inteligencia innata" con el concepto religioso oriental de la energía, el chi, y la idea de que los músculos pueden indicar el estado de los órganos del cuerpo a través de los meridianos del chi. Se dice que desarrolló una serie de elaborados gráficos que muestran la relación entre determinados órganos y zonas del cuerpo, así como con nutrientes y hierbas específicos. Según Goodheart, la información de los gráficos se obtuvo, al menos en parte, a través de poderes psíquicos.
Los defensores de la kinesiología aplicada afirman ser capaces de diagnosticar enfermedades, descubrir partes de debilidad, identificar desequilibrios químicos, detectar alergias, discernir los valores nutritivos de los alimentos y encontrar influencias y reacciones tóxicas utilizando los métodos de Goodheart. Los practicantes de la kinesiología aplicada también se han diversificado hacia otras partes, afirmando ser capaces de detectar si alguien está diciendo la verdad, si tiene un trastorno de personalidad o un problema emocional, y si alguien o algo es inherentemente bueno o malo. Supuestamente, con estos métodos se puede descubrir información relacionada con vidas pasadas. Algunos incluso han afirmado tener la capacidad de comunicarse con las plantas u otras fuerzas de la naturaleza. La kinesiología conductual, una extensión de la kinesiología aplicada, utiliza pruebas musculares para determinar básicamente todo en la vida de una persona, como la selección de música, los colores de las pinturas, las elecciones alimenticias y las decisiones sobre las relaciones. Touch for Health, una versión para aficionados de la kinesiología aplicada, se adentra aún más en el ámbito psíquico. Afirma que la energía vital se puede regular y manipular solo con el poder mental. Esta es la práctica de visualización de la Nueva Era. Touch for Health incorpora la creencia de que "somos uno con el universo" y que el poder mental nos permite acceder a la fuerza vital que nos rodea y nos impregna.
Apenas existen estudios científicos creíbles sobre kinesiología aplicada realizados por universidades importantes y publicados en revistas médicas respetadas y revisadas por pares. Esto se debe posiblemente al hecho de que pocos científicos o médicos titulados se toman en serio sus afirmaciones. Se realizó un estudio doble ciego para evaluar las afirmaciones de la kinesiología aplicada, que se publicó en la edición de junio de 1988 de la revista Journal of the American Dietetic Association. El estudio evaluó específicamente a tres kinesiólogos aplicados con experiencia que evaluaron a atletas en relación con cuatro nutrientes: tiamina, zinc, vitamina A y ácido ascórbico. Se evaluó la fiabilidad de los resultados obtenidos por los tres profesionales, comparándolos entre sí, con los resultados de pruebas de laboratorio estándar que analizaban el estado nutricional y con pruebas computarizadas de la fortaleza real de la contracción muscular. Desde el punto de vista estadístico, los resultados fueron desastrosos para la kinesiología aplicada. Los evaluadores no coincidieron entre sí, no lograron discernir las verdaderas diferencias nutricionales y ni siquiera pudieron juzgar con certeza las diferencias reales en la fortaleza muscular. El resumen concluye que "los resultados de este estudio indicaron que el uso de la kinesiología aplicada para evaluar el estado nutricional no es más útil que las conjeturas al azar".
En otro estudio doble ciego publicado en la edición de marzo de 1981 de la revista Journal of Prosthetic Dentistry, páginas 321-323, la kinesiología aplicada no logró distinguir una sustancia de prueba de un placebo. Muchos estudios han demostrado que los resultados de la kinesiología aplicada no son reproducibles. Una amplia revisión de los estudios sobre kinesiología aplicada publicada en Chiropractic and Osteopathy concluyó que "los pocos estudios que evalúan procedimientos únicos de kinesiología aplicada refutan o no pueden respaldar la validez de los procedimientos de kinesiología aplicada como pruebas diagnósticas. Las pruebas disponibles hasta la fecha no respaldan el uso de [pruebas musculares manuales] para el diagnóstico de enfermedades orgánicas o afecciones preclínicas o subclínicas". En resumen, ningún estudio ha demostrado nunca ningún modelo físico legítimo que muestre cómo funciona basándose en las leyes conocidas y aceptadas de la anatomía física. Actualmente, no hay estudios científicos patrocinados por el gobierno o la universidad que demuestren que la kinesiología aplicada sea segura, eficaz o precisa.
Según una reciente encuesta de Time/CNN, alrededor del 30 % de los estadounidenses han recurrido a alguna forma de "terapia no convencional", "la mitad de ellos en el último año". Esta tendencia está dando al movimiento de la Nueva Era su mejor oportunidad para convertir nuestra cultura. Muchas modalidades de salud holística, incluida la kinesiología aplicada, incorporan una filosofía panteísta/oculta y la experiencia espiritual que pueden atraer a pacientes desprevenidos y vulnerables. Esto puede llevar a un pensamiento perverso sobre Dios que es directamente contrario a lo que enseña la Biblia.
Si bien es cierto que la kinesiología aplicada no se aborda directamente en la Biblia, se nos exhorta a ejercer sabiduría y prudencia con respecto a aquellos temas específicos, y sobre los cuales la Biblia guarda silencio. Aunque las fuerzas vitales o el chi no han sido probados por la ciencia, son una característica bien reconocida del paganismo. La manifestación de estas fuerzas vitales, ya sea en el paganismo antiguo, el ocultismo moderno o la investigación parapsicológica, ha estado invariablemente acompañada de estados alterados de conciencia, fenómenos psíquicos y contacto con espíritus. Quienes han profundizado en estas fuerzas suelen estar completamente involucrados en el mundo pagano/oculto. La asociación y la participación en tales prácticas están específicamente prohibidas en la Biblia (Levítico 19:31; 20:6, 27; Deuteronomio 18:11; Isaías 8:19).
Los kinesiólogos aplicados creen en un poder interior, una "inteligencia innata", que se dice que está conectada con la "inteligencia universal" (Dios) a través de nuestro sistema nervioso. Esta teoría opera en el contexto del panteísmo: toda la realidad es Dios. Dios es energía impersonal, pero consciente; por lo tanto, toda la realidad es una manifestación de energía espiritual. Y si esta energía puede liberarse, el hombre será sanado y místicamente iluminado hacia su verdadera divinidad. Las manifestaciones reales de esta energía (por ejemplo, la sanidad) han convencido a muchos de que el panteísmo de la Nueva Era debe ser cierto (y esto proporciona un motivo para que las fuerzas satánicas manifiesten tales sanidades).
La Biblia enseña que Dios es personal, que desea una relación íntima con nosotros (Juan 1:12; 14:6; 3:16), que nos ama y que actúa o interviene en favor de aquellos que invocan su nombre. A lo largo de la Biblia hay registros de que Dios establece pactos individuales, responde a oraciones específicas de personas y entrega mensajes específicos. A cambio, estamos llamados a desarrollar una relación personal con Dios a través de Jesucristo. Esa relación depende de la gracia de Dios, no de ninguna obra que hagamos (Efesios 2:8-9).
La cosmovisión bíblica de Dios es que, si bien Dios es ciertamente omnipresente (Salmo 139:7-16), también es trascendente y no forma parte de la creación (Hechos 17:24-25; 1 Reyes 8:27). Creer en la omnipresencia de Dios no es sinónimo de creer que Dios está en todo y que todo está en Dios. Es evidente que Dios no está en todo y no aprueba todo. Sin duda, existe un reino de oscuridad, idolatría y demonios que se nos instruye evitar (Efesios 5:11; 1 Pedro 5:8). Como seguidores de Cristo, estamos llamados a caminar en la luz, distinguiéndonos en nuestra forma de vivir (1 Tesalonicenses 5:5).
Dada la disparidad entre estas enseñanzas bíblicas y las filosofías ocultas de la kinesiología aplicada, esta no puede considerarse coherente con la Biblia. Para los cristianos, Colosenses 2:8 ofrece el mejor consejo sobre la kinesiología aplicada y todas las demás prácticas pseudocientíficas que incorporan filosofías de la Nueva Era: "Miren que nadie los haga cautivos por medio de su filosofía y vanas sutilezas, según la tradición de los hombres, conforme a los principios elementales del mundo y no según Cristo".
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¿Qué dice la Biblia sobre la kinesiología aplicada?
