Pregunta
¿Dónde y qué es el Gólgota o Calvario?
Respuesta
Gólgota es el nombre arameo del lugar donde Jesús fue crucificado, situado fuera de las murallas de la antigua Jerusalén. El evangelio de Juan relata: "Tomaron, pues, a Jesús, y Él salió cargando Su cruz al sitio llamado el Lugar de la Calavera, que en hebreo se dice Gólgota, donde lo crucificaron, y con Él a otros dos, uno a cada lado y Jesús en medio" (Juan 19:16–18). El Gólgota también se menciona en Mateo 27:32–34 y Marcos 15:21–22.
En Lucas 23:33, algunas traducciones usan la palabra Calvario para referirse al mismo lugar. En versiones modernas se suele traducir literalmente como "el lugar que se llama La Calavera". El término Calvario proviene del latín Calvariae Locus, que significa precisamente "lugar de la calavera". Contando esta referencia, los cuatro evangelios se refieren a esta colina específica como el lugar donde Jesús fue crucificado.
Según los primeros padres de la Iglesia, el sitio recibió ese nombre debido a la forma de la colina, que al parecer recordaba un cráneo humano. Aunque ha existido cierta controversia sobre la ubicación exacta, el lugar tradicional se encuentra bajo la Iglesia del Santo Sepulcro, en el cuadrante noroeste de la Ciudad Vieja de Jerusalén. Esta iglesia fue construida sobre un promontorio llamado "la Roca del Gólgota", considerado el lugar de la crucifixión. También incluye una tumba excavada en roca donde, según la tradición, fue colocado el cuerpo de Jesús. La construcción del templo fue supervisada por Helena, madre del emperador Constantino, en el año 325 d.C., y desde entonces ha sido reconocida como el lugar tradicional de la muerte y sepultura de Cristo.
La ubicación del Gólgota es profundamente significativa para los cristianos por los acontecimientos que allí tuvieron lugar. En aquel día decisivo, Jesús cargó con Su cruz, ayudado por un hombre llamado Simón, hasta la colina donde fue clavado en manos y pies. Murió entre dos criminales, uno a cada lado. Uno de ellos, al reconocer quién era Jesús, le dijo que se acordara de él en Su reino, a lo que Jesús respondió: "En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lucas 23:43).
Fue allí donde Jesús derramó Su sangre para perdonar y redimir a los pecadores que depositan su fe en Él. Todavía hoy, el Gólgota o Calvario nos recuerda el sacrificio supremo de Cristo, el único que puede perdonar el pecado y reconciliar al ser humano con Dios (Hebreos 10:12; Hechos 4:12).
En Lucas 23:33, algunas traducciones usan la palabra Calvario para referirse al mismo lugar. En versiones modernas se suele traducir literalmente como "el lugar que se llama La Calavera". El término Calvario proviene del latín Calvariae Locus, que significa precisamente "lugar de la calavera". Contando esta referencia, los cuatro evangelios se refieren a esta colina específica como el lugar donde Jesús fue crucificado.
Según los primeros padres de la Iglesia, el sitio recibió ese nombre debido a la forma de la colina, que al parecer recordaba un cráneo humano. Aunque ha existido cierta controversia sobre la ubicación exacta, el lugar tradicional se encuentra bajo la Iglesia del Santo Sepulcro, en el cuadrante noroeste de la Ciudad Vieja de Jerusalén. Esta iglesia fue construida sobre un promontorio llamado "la Roca del Gólgota", considerado el lugar de la crucifixión. También incluye una tumba excavada en roca donde, según la tradición, fue colocado el cuerpo de Jesús. La construcción del templo fue supervisada por Helena, madre del emperador Constantino, en el año 325 d.C., y desde entonces ha sido reconocida como el lugar tradicional de la muerte y sepultura de Cristo.
La ubicación del Gólgota es profundamente significativa para los cristianos por los acontecimientos que allí tuvieron lugar. En aquel día decisivo, Jesús cargó con Su cruz, ayudado por un hombre llamado Simón, hasta la colina donde fue clavado en manos y pies. Murió entre dos criminales, uno a cada lado. Uno de ellos, al reconocer quién era Jesús, le dijo que se acordara de él en Su reino, a lo que Jesús respondió: "En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lucas 23:43).
Fue allí donde Jesús derramó Su sangre para perdonar y redimir a los pecadores que depositan su fe en Él. Todavía hoy, el Gólgota o Calvario nos recuerda el sacrificio supremo de Cristo, el único que puede perdonar el pecado y reconciliar al ser humano con Dios (Hebreos 10:12; Hechos 4:12).