Pregunta

¿Qué dice la Biblia sobre apuñalar por la espalda?

Respuesta
Apuñalar por la espalda es una forma de traición, muchas veces verbal, llevada a cabo por alguien que aparenta ser amigo. La expresión pinta la imagen de una persona que es amable frente a ti, pero que en secreto te ataca, calumnia o socava tu reputación. Es un acto cobarde, porque evita el enfrentamiento honesto y prefiere la difamación, la venganza pasivo-agresiva o el engaño escondido tras una sonrisa.

El Salmo 55 refleja el clamor de angustia de David al ser apuñalado por la espalda por alguien cercano. Enemigos no le faltaban, pero esta traición dolía más porque venía de un amigo íntimo: "Porque no es un enemigo el que me reprocha, si así fuera, podría soportarlo; ni es uno que me odia el que se ha alzado contra mí, si así fuera, podría ocultarme de él; sino tú, que eres mi igual, mi compañero, mi íntimo amigo" (Salmo 55:12-13, NBLA). Muchos estudiosos creen que David hablaba de Ahitofel, su consejero, quien se volvió traidor y se unió a la rebelión de Absalón (2 Samuel 15:31; 16:23; 17:23). Sea quien fuera, este hombre lo engañó, mintió sobre él y lo abandonó en su momento más vulnerable.

Los que apuñalan por la espalda no caminan en amor, como Dios nos ordena (Efesios 5:2; 2 Juan 1:6). Se rigen por el egoísmo (Filipenses 2:4). Es hipocresía en acción: simulan lealtad mientras, en secreto, destruyen al otro o dañan su reputación. Este tipo de comportamiento suele ir acompañado de calumnias, chismes y siembras de discordia, todos ellos condenados claramente por la Biblia (Colosenses 3:8; 1 Pedro 2:1; Romanos 1:29; Proverbios 17:4; 2 Corintios 12:20).

La Biblia condena la traición y todo lo que conlleva. Proverbios 10:18 dice: "El que oculta el odio tiene labios mentirosos, y el que esparce calumnia es un necio" (NBLA). Los que actúan así son necios, porque rechazan la verdad, el amor, la reconciliación y la bondad. También desobedecen directamente la Regla de Oro que Jesús enseña: "Todo cuanto quieran que los hombres les hagan, así también hagan ustedes con ellos" (Mateo 7:12, NBLA). Quienes tengan la tendencia a hablar mal de otros o dañar a quienes dicen valorar, deberían examinar profundamente sus motivos y actitudes a la luz de la Palabra. No se puede edificar la confianza ni ejercer influencia espiritual si uno es conocido por apuñalar a otros por la espalda.