settings icon
share icon
Pregunta

¿Qué significa que Dios no puede ser tentado (Santiago 1:13)?

Respuesta


Santiago 1:13 dice: "Que nadie diga cuando es tentado: Soy tentado por Dios. Porque Dios no puede ser tentado por el mal y Él mismo no tienta a nadie". Santiago continúa explicando de dónde proviene realmente la tentación de pecar: "cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión" (versículo 14).

Anteriormente en este pasaje, Santiago explica a los creyentes el propósito de las "diversas pruebas" y "la prueba de su fe" (Santiago 1:2-3). Las pruebas son una parte inevitable de la vida en un mundo maldito por el pecado (Juan 16:33), y debemos aceptarlas porque producen perseverancia (Santiago 1:3), que nos hace "perfectos y completos, sin que nada les falte" (versículo 4).

La forma en que respondemos a las pruebas determina su efecto sobre nosotros. "Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado, recibirá la corona de la vida que el Señor ha prometido a los que lo aman" (Santiago 1:12). Santiago no está diciendo que permanecer firme en las pruebas dará como resultado la corona de la vida; más bien, está asegurando a aquellos que han recibido la corona de la vida por medio de la fe en Cristo que no se sentirán tan abrumados por las pruebas como para culpar a Dios por tentarlos a pecar. Dios, que no puede ser tentado, no tienta a nadie.

Si la prueba a la que nos enfrentamos implica una incitación al pecado, Santiago dice que no debemos considerar que la incitación al pecado proviene de Dios. Dios no quiere que nadie peque, y no nos tienta para que pequemos. Su objetivo es la prueba, no el pecado. Las pruebas están diseñadas para refinarnos como el oro se refina con el fuego: "En lo cual ustedes se regocijan grandemente, aunque ahora, por un poco de tiempo si es necesario, sean afligidos con diversas pruebas, para que la prueba de la fe de ustedes, más preciosa que el oro que perece, aunque probado por fuego, sea hallada que resulta en alabanza, gloria y honor en la revelación de Jesucristo" (1 Pedro 1:6-7).

A diferencia de los seres humanos, Dios no puede ser tentado a pecar porque todo lo que hay en Él es exactamente lo contrario del pecado. Los seres humanos nacemos con una naturaleza pecaminosa heredada de Adán, y esa naturaleza es parte de lo que nos atrae y nos aleja de lo que es bueno. Dios no tiene naturaleza pecaminosa; Su naturaleza es santa y justa. Él no puede pecar ni siquiera ser tentado a pecar. Las tentaciones que nos llevan a pecar no tienen ningún efecto sobre Dios.

No hay absolutamente nada en la naturaleza de Dios que le haga inclinarse a hacer el mal, y no hay absolutamente nada que se le pueda ofrecer que le haga hacer el mal. Interna y externamente, Dios es inmune a la tentación. De ello se deduce, entonces, que Dios no tentaría a ninguna persona a pecar y, por lo tanto, no se convertiría en el autor del pecado. El Santo no justificará el pecado, ni lo excusará, y no lo incitará.

Debido a esta verdad acerca de Dios, que Él no puede ser tentado a pecar, podemos tener la confianza de que el universo está en buenas manos. Dios no puede ser persuadido, sobornado ni influenciado de ninguna manera para apartarse de Su propósito y plan perfectos. Él no vacila. Pase lo que pase, Él sigue siendo la Perfección.

English



Retornar a la página inicial de Español

¿Qué significa que Dios no puede ser tentado (Santiago 1:13)?
Suscríbete a la

Pregunta de la Semana

Comparte esta página: Facebook icon Twitter icon Pinterest icon YouTube icon Email icon
© Copyright Got Questions Ministries