Pregunta
¿Cuál es el significado de la raíz de Isaí en la Biblia?
Respuesta
Raíz de Jesé es una metáfora que se encuentra en Isaías 11:10: "Acontecerá en aquel día que las naciones acudirán a la raíz de Isaí, que estará puesta como señal para los pueblos, y será gloriosa Su morada". El término raíz de Isaí representa figurativamente al Mesías.
La "raíz" de una familia es su progenitor. Isaí era el padre del rey David. Sabemos por los registros genealógicos (Mateo 1:1-17 y Lucas 3:23-38) que Jesús descendía del linaje de Isaí y su hijo David. En Isaías 11:10, la palabra hebrea utilizada para "raíz" (sheresh) implica una raíz que permanece viva y da un brote o una rama; por lo tanto, la raíz de Isaí era una raíz de la que podían surgir más descendientes.
Cuando Isaías comenzó a profetizar, existía entre el pueblo la esperanza de que un glorioso rey terrenal, el Mesías, asumiera el trono de David. A través del profeta Natán, Dios había prometido a David que su descendencia establecería un reino eterno: "Cuando tus días se cumplan y reposes con tus padres, levantaré a tu descendiente después de ti, el cual saldrá de tus entrañas, y estableceré su reino. Él edificará casa a Mi nombre, y Yo estableceré el trono de su reino para siempre. Yo seré padre para él y él será hijo para Mí...Tu casa y tu reino permanecerán para siempre delante de Mí; tu trono será establecido para siempre" (2 Samuel 7:12-16). El título mesiánico "Hijo de David" se remonta a esta profecía.
El uso que Isaías hace de la raíz de Isaí expresa la promesa de un rey mesiánico que nacería del linaje de David y centra la expectativa de supervivencia de Judá en un remanente escaso y sin líder. El profeta utiliza una metáfora similar —"un retoño brotará del tronco de Isaí"— en Isaías 11:1 para describir su esperanza futura. Este "tronco" significa el remanente de la familia de Isaí que apenas sobreviviría. El juicio de Dios se cernía sobre Judá, y la nación se quedaría sin nada más que un "tronco" aparentemente sin vida, pero aún habría vida. Dios prometió conservar un remanente para continuar Su obra y el linaje del rey David. Lo que parecía un tronco muerto y en descomposición daría lugar a una nueva vida en el Mesías, Jesucristo.
Citando la Septuaginta, el apóstol Pablo se refirió a la profecía de Isaías en Romanos 15:8-13. Pablo reconoció específicamente a Jesucristo como la raíz de Isaí en quien los gentiles ponían su esperanza: "Y a su vez, Isaías dice: Retoñará la raíz de Isaí, el que se levanta a regir a los gentiles; los gentiles pondrán en Él su esperanza" (versículo 12). Y en el libro del Apocalipsis, Jesús afirma: "Yo, Jesús, he enviado a Mi ángel a fin de darles a ustedes testimonio de estas cosas para las iglesias. Yo soy la raíz y la descendencia de David, el lucero resplandeciente de la mañana" (Apocalipsis 22:16).
El uso que Isaías hace de la expresión "raíz de Isaí" pone de relieve la humanidad de Jesús. El Mesías tendría ascendencia humana. También subraya los orígenes humildes de Cristo. Como pastor de Belén, Isaí ocupaba una posición relativamente humilde en la vida. El rey Saúl solía utilizar la expresión "el hijo de Isaí' para referirse a David de manera despectiva (1 Samuel 20:27, 30-31; 22:7-8). El árbol de Isaí es una costumbre de Adviento que tiene su origen en la profecía de Isaías sobre la raíz de Isaí. En lugar de perecer, la familia de Isaí creció hasta convertirse en una rama que dio fruto en forma de Mesías: "Entonces un retoño brotará del tronco de Isaí, y un vástago dará fruto de sus raíces" (Isaías 11:1). Durante el Adviento, algunos utilizan un árbol de Isaí para representar la genealogía de Jesucristo.
La tradición del árbol de Isaí se remonta a la Edad Media. En las primeras representaciones predominaban los tapices y los vitrales que mostraban un árbol con Isaí en las raíces y Jesús en la rama superior. Como representaciones pictóricas, permitían a las personas sin estudios aprender las historias de las Escrituras desde la creación hasta el nacimiento de Jesucristo.
Hoy en día, las familias suelen utilizar un árbol de Isaí en lugar de un calendario de Adviento para enseñar a sus hijos la Biblia y la historia de la salvación en Navidad. Cada día de Adviento se colocan adornos simbólicos en el árbol, acto que va seguido de una breve reflexión para explorar y reforzar el significado bíblico de cada adorno. Existen varias variaciones de los temas del árbol de Isaí, entre ellas las profecías mesiánicas, los antepasados de la estirpe de Jesús, las promesas de Dios y las historias importantes de la Biblia.
Aunque se sabe poco en las Escrituras sobre el hombre Isaí, a lo largo del Antiguo y del Nuevo Testamento se le asocia con el Mesías y se le menciona como antepasado de Jesucristo. En el libro de los Hechos, Pablo deja claro una vez más que la "raíz de Isaí", la promesa de Dios a David, es efectivamente el Mesías y Salvador, Jesucristo: "Cuando lo quitó, les levantó por rey a David, del cual Dios también testificó y dijo: He hallado a David, hijo de Isaí, un hombre conforme a Mi corazón, que hará toda Mi voluntad. De la descendencia de este, conforme a la promesa, Dios ha dado a Israel un Salvador, Jesús" (Hechos 13:22-23).
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