Pregunta
¿Qué es la abominación desoladora?
Respuesta
Jesús habló de una "abominación desoladora" venidera en el Discurso del Monte de los Olivos, al referirse a un acontecimiento futuro mencionado en Daniel 9:27. En Mateo 24:15-16, Jesús dice: "Por tanto, cuando ustedes vean la abominación de la desolación, de que se habló por medio del profeta Daniel, colocada en el lugar santo, y el que lea que entienda, entonces los que estén en Judea, huyan a los montes".
Una abominación es "algo que causa repugnancia u odio"; y desolación es "un estado de vacío o destrucción total". Jesús advirtió que algo (o alguien) que la gente detestaba estaría algún día en el templo. Cuando ocurriera ese horror, los habitantes de Judea debían buscar refugio sin demora. Otras traducciones hablan de "la abominación que causa destrucción" (NVI), "el objeto sacrílego que causa profanación" (NTV).
Jesús hizo referencia a Daniel en Sus palabras en el discurso del Monte de los Olivos. El profeta Daniel mencionó la abominación desoladora en tres lugares:
"El gobernante firmará un tratado con el pueblo por un período de un conjunto de siete, pero al cumplirse la mitad de ese tiempo, pondrá fin a los sacrificios y a las ofrendas. Como punto culminante de todos sus terribles actos, colocará un objeto sacrílego que causa profanación hasta que el destino decretado para este profanador finalmente caiga sobre él" (Daniel 9:27 - NTV).
"Y de su parte se levantarán tropas, profanarán el santuario fortaleza, pondrán fin al sacrificio perpetuo y establecerán la abominación de la desolación" (Daniel 11:31).
"A partir del momento en que se suspenda el sacrificio diario y se establezca la abominación que causa destrucción, transcurrirán mil doscientos noventa días" (Daniel 12:11).
La redacción de las traducciones anteriores indica que la abominación desoladora es un objeto; en otras traducciones, la abominación parece ser una persona: "Sobre el ala de abominaciones vendrá el desolador" (Daniel 9:27, ESV).
Independientemente de si la abominación desoladora es una persona o una cosa, Daniel predijo lo siguiente:
1. Un futuro gobernante hará un tratado con el pueblo de Israel.
2. Los términos de este tratado serán por una "semana", que entendemos que es un período de siete años.
3. A mitad de este tiempo, el gobernante reunirá a sus tropas y pondrá fin a los sacrificios y ofrendas en el templo.
4. En ese momento, el gobernante profanará el templo, colocando algún tipo de objeto sacrílego.
5. La profanación del templo continuará hasta que finalmente se dicte el juicio de Dios sobre el gobernante y sus seguidores, 1290 días (tres años y medio y un mes) después.
Las profecías de Daniel sobre la abominación desoladora parecieron cumplirse, al menos en parte, en el año 167 a. C., cuando un gobernante griego llamado Antíoco IV profanó el templo de Jerusalén. Antíoco se autodenominó "Epífanes" ("ilustre" o "dios manifiesto"). Levantó un altar a Zeus sobre el altar de los holocaustos y sacrificó un cerdo en él. Antíoco fue aún más lejos en sus atrocidades, matando a un gran número de judíos y vendiendo a otros como esclavos. Además, promulgó decretos que prohibían la circuncisión y obligaban a los judíos a sacrificar a los dioses paganos y a comer carne de cerdo.
Lo que hizo Antíoco sin duda puede calificarse de abominación, pero no fue el cumplimiento completo de la profecía de Daniel. Antíoco Epífanes no firmó un pacto con Israel durante siete años, por ejemplo. Y en Mateo 24, Jesús, hablando unos 200 años después de las malvadas acciones de Antíoco, dijo que la profecía de Daniel aún tenía que cumplirse en el futuro.
La pregunta entonces es: ¿cuándo, después de la época de Jesús, se cumplió la profecía de la abominación desoladora? ¿O todavía estamos esperando que se cumpla? La visión preterista es que la advertencia de Jesús en Mateo 24:15 se refería a los acontecimientos que condujeron a la destrucción de Jerusalén en el año 70 d. C. Según esta visión, la abominación de la desolación probablemente ocurrió durante la ocupación romana de Jerusalén, cuando el ejército romano llevó sus imágenes y estandartes paganos al templo.
Nosotros adoptamos la visión futurista, que considera que la profecía de la abominación desoladora aún está por cumplirse. En nuestra opinión, Jesús se refería al Anticristo, quien, en los últimos tiempos, establecerá un pacto con Israel por siete años y luego lo romperá haciendo algo similar a lo que hizo Antíoco Epífanes en el templo. El objeto sacrílego que Jesús llamó "la abominación desoladora" podría ser la "imagen de la bestia" que el falso profeta, la mano derecha del Anticristo, ordenará que se erija y se adore (Apocalipsis 13:14). Por supuesto, para que Mateo 24:15 sea aún futuro, el templo de Jerusalén tendrá que ser reconstruido antes de que comience la tribulación.
Los que estén vivos durante la tribulación deben estar atentos y reconocer que la ruptura del pacto con Israel y la abominación de la desolación anunciarán el comienzo de los peores tres años y medio de la historia (ver Mateo 24:21). "Pero velen en todo tiempo, orando para que tengan fuerza para escapar de todas estas cosas que están por suceder, y puedan estar en pie delante del Hijo del Hombre" (Lucas 21:36).
English
¿Qué es la abominación desoladora?
