Pregunta

El fruto del Espíritu Santo – ¿Qué es el amor?

Respuesta
Gálatas 5:22-23 es uno de los pasajes más amados de la Biblia. Sin embargo, el "fruto del Espíritu" a veces se malinterpreta como características que los creyentes deben producir por su propio esfuerzo. Pero la clave para entender estas cualidades está en el mismo nombre. "Fruto" es el resultado natural del crecimiento. Y "del Espíritu" deja en claro quién produce ese crecimiento: no es por nuestro esfuerzo o determinación, sino por el poder del Espíritu Santo. Ninguna cantidad de trabajo humano o fuerza de voluntad puede producir fruto espiritual, pero la influencia del Espíritu en un corazón rendido puede hacer milagros. El fruto del "amor" quizá sea el mejor ejemplo. No podemos producir el tipo de amor que Dios desea sin la guía y fortaleza del Espíritu Santo.

La palabra "amor" en español tiene un significado muy amplio, pero el idioma griego es mucho más preciso. El amor que el Espíritu Santo produce en los creyentes es ágape. Este amor no es un sentimiento, sino una decisión. Es la decisión de ser bondadoso, de sacrificarse, de considerar las necesidades de los demás como superiores a las propias (Filipenses 2:3). La palabra ágape se usa en todos los versículos del Nuevo Testamento que hablan del amor en su forma más difícil:

"Nadie tiene un amor mayor que este: que uno dé su vida por sus amigos" (Juan 15:13, NBLA).

"Porque este es el mensaje que ustedes han oído desde el principio: que nos amemos unos a otros" (1 Juan 3:11, NBLA).

"Amen a sus enemigos, y hagan bien, y presten no esperando nada a cambio" (Lucas 6:35, NBLA).

"Porque este es el amor de Dios: que guardemos Sus mandamientos, y Sus mandamientos no son difíciles" (1 Juan 5:3, NBLA).

Es por amor que Dios llevó a cabo Su plan para salvar al mundo: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, sino que tenga vida eterna" (Juan 3:16, NBLA). Y solo por medio del amor podemos cumplir los mandamientos más importantes: "Amarás al Señor tu Dios" y "Amarás a tu prójimo como a ti mismo" (Marcos 12:30-31, NBLA).

El amor es el regalo más grande que Dios puede dar. En 1 Corintios 13 se dice que el amor ágape es paciente, es benigno y nunca falla. Dios desea mostrar Su amor perfecto y desinteresado a un mundo que a menudo está confundido sobre lo que el verdadero amor significa. Los hijos de Dios son los canales de ese amor, al ser capacitados por el Espíritu Santo.