Pregunta

¿Quién fue Adoni Bezec?

Respuesta
Adoni Bezec es un nombre que significa "señor de Bezec" y se menciona en Jueces 1:5–7: "Hallaron a Adoni Bezec en Bezec y pelearon contra él, y derrotaron a los cananeos y a los ferezeos. Adoni Bezec huyó, pero lo persiguieron, lo prendieron y le cortaron los pulgares de las manos y de los pies. Y Adoni Bezec dijo: "Setenta reyes, con los pulgares de sus manos y de sus pies cortados, recogían migajas debajo de mi mesa. Como yo he hecho, así me ha pagado Dios". Lo llevaron a Jerusalén, y allí murió" (NBLA).

Este gobernante violento fue derrotado por la tribu de Judá, con la ayuda de Simeón. Sus captores le cortaron los pulgares y los dedos gordos de los pies. Luego fue llevado prisionero a Jerusalén, donde murió más tarde. Aunque Dios no ordenó específicamente mutilar al señor de Bezec, el propio rey reconoció que lo que le hicieron fue justo, basándose en cómo él había tratado a otros gobernantes.

La ciudad de Bezec es conocida hoy como Khirbet Ibziq, una aldea al norte de Tubas, en Cisjordania (ver 1 Samuel 11:8). El hecho de que Adoni Bezec mandara sobre 10,000 soldados y que hubiera torturado a setenta reyes indica que era un hombre muy poderoso. Bezec, que significa "rayo", podría haber tenido una conexión con el culto al dios cananeo de la tormenta, Baal, cuyas imágenes lo representan generalmente sosteniendo un rayo.

Algunos consideran la tortura de Adoni Bezec como un acto perverso o como justicia retributiva, pero es evidente que el trato que los israelitas le dieron a este rey fue un acto de desobediencia. Deuteronomio 7:24 dice: "Entregará en tus manos a sus reyes de modo que harás perecer sus nombres de debajo del cielo; ningún hombre podrá hacerte frente, hasta que tú los hayas destruido a todos" (NBLA). En vez de torturar a los reyes que vencían, los israelitas tenían la orden de destruirlos completamente.

Esta falta de obediencia al derrotar completamente a sus enemigos es un tema recurrente en el libro de Jueces. Jueces 1:19 y 21 dicen: "El Señor estaba con Judá, que tomó posesión de la región montañosa. Pero Judá no pudo expulsar a los habitantes del valle porque estos tenían carros de hierro. . . . Pero los hijos de Benjamín no expulsaron a los jebuseos que vivían en Jerusalén. Así que los jebuseos han vivido con los benjamitas en Jerusalén hasta el día de hoy" (NBLA). Los versículos finales del capítulo 1 también destacan lo incompleto de la conquista de la Tierra Prometida. Esta introducción prepara al lector para lo que viene a continuación: un ciclo repetido de pecado, opresión por parte de los enemigos, clamor a Dios, y luego el levantamiento de un juez para rescatar al pueblo.

Adoni Bezec fue un malvado gobernante cananeo. Fue uno entre muchos que el pueblo de Israel derrotó, pero se le permitió vivir, en clara desobediencia al mandato de Dios. El libro de Jueces ofrece muchos otros ejemplos de cómo la desobediencia del pueblo trajo consigo tiempos difíciles, hasta que se volvían a Dios en arrepentimiento y obediencia.