Pregunta
¿Qué es el Verbo de vida en 1 Juan 1:1?
Respuesta
En 1 Juan 1:1, el apóstol Juan comienza su carta proclamando al Verbo de vida: "Lo que existía desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros propios ojos, lo que hemos contemplado y lo que han tocado nuestras manos, esto escribimos acerca del Verbo de vida" (NBLA). El "Verbo de vida" se refiere a Jesús y también puede referirse al evangelio, el mensaje de salvación y reconciliación hecho posible por el Hijo de Dios (Filipenses 2:16).
El término griego para "verbo" es logos, reconocido por los griegos como el medio a través del cual Dios creó el mundo y se comunicó con Su creación. Los judíos entendían "el Verbo" en el Antiguo Testamento como el instrumento mediante el cual Dios creó el universo (Salmo 33:6). A la luz de estas comprensiones, Juan presenta a Jesús como el Logos tanto en su evangelio como en esta carta, subrayando que Jesús es Aquel por medio de quien el mundo fue hecho y la vida se manifestó (Juan 1:3–4).
La vida eterna también proviene de Jesús, confirmando Su papel como el Verbo de vida. Como indica Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, sino que tenga vida eterna" (NBLA). Jesús, en Juan 14:6, se identifica a sí mismo como "el camino, y la verdad, y la vida".
Por lo tanto, solo el Verbo de vida puede impartir verdadera vida; buscar la vida eterna fuera de Él resulta inútil. Jesús no solo es el Dador de vida: Él es la vida. Creer en la persona y en la obra redentora del Verbo de vida otorga vida eterna.
Hoy en día, los cristianos son a menudo tildados de intolerantes por proclamar que Jesús es el único camino hacia Dios. Ante tantas opciones, ¿por qué insistir en la exclusividad de Cristo? Incluso algunos que se identifican como cristianos luchan con esto. Sin embargo, no es intolerante que Dios posea la llave de Su propia presencia. Él decide quién puede entrar en Su morada celestial, al igual que nosotros decidimos quién entra en nuestro hogar terrenal.
La pregunta crucial es si Jesús es quien las Escrituras dicen que es. Si lo es, negar Su exclusividad no sería un acto de amor, especialmente si afirmamos que Él es el Salvador. La única respuesta verdaderamente amorosa hacia quienes tienen hambre espiritual es señalarles dónde está el Pan.
Después del milagro de la alimentación de los cinco mil, Jesús pronunció un discurso acerca de ser el Pan de vida que descendió del cielo (Juan 6:35). Muchos se apartaron de Él en ese momento (versículo 66). "Entonces Jesús dijo a los doce discípulos: "¿Acaso también ustedes quieren irse?". Simón Pedro le respondió: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna" (versículos 67–68, NBLA). El Pan de vida es el Verbo de vida, y los discípulos reconocieron esta verdad.
Jesús es el Verbo de vida, el Logos que dio vida en la creación y que da vida en la nueva creación.
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¿Qué es el Verbo de vida en 1 Juan 1:1?
