Pregunta
¿Qué es el Domingo de Pascua?
Respuesta
El Domingo de Pascua, o Domingo de Resurrección, es una de las fiestas cristianas más significativas del calendario. Ese día se conmemora la resurrección del Señor Jesucristo, que se mostró vivo después de permanecer tres días en el sepulcro. El primer Domingo de Resurrección lo cambió todo, y todos los Domingos de Resurrección posteriores reflejan el gozo, el asombro y la adoración que sintieron aquellos primeros discípulos cuando vieron por primera vez al Señor resucitado.
Lucas relata lo que ocurrió aquel primer Domingo de Pascua cuando las mujeres seguidoras de Jesús descubrieron la tumba vacía: "Pero el primer día de la semana, al rayar el alba, las mujeres vinieron al sepulcro trayendo las especias aromáticas que habían preparado. Encontraron que la piedra había sido removida del sepulcro, y cuando entraron, no hallaron el cuerpo del Señor Jesús. Aconteció que estando ellas perplejas por esto, de pronto se pusieron junto a ellas dos varones en vestiduras resplandecientes. Estando ellas aterrorizadas e inclinados sus rostros a tierra, ellos les dijeron: ¿Por qué buscan entre los muertos al que vive? No está aquí, sino que ha resucitado" (Lucas 24:1-6).
La Biblia enseña que la resurrección de Jesucristo fue una resurrección física de Su cuerpo (ver Lucas 24:39). El Domingo de Resurrección demostró la deidad de Jesús, confirmó Sus profecías, validó las Escrituras, triunfó sobre las fuerzas del mal, proveyó para nuestra justificación (Romanos 4:25) y garantizó la resurrección de todos los que confían en Cristo.
Al igual que la Navidad, el Domingo de Resurrección se celebra de diversas formas, religiosas y laicas. Desde el punto de vista laico, el Domingo de Resurrección supone la visita del Conejo de Pascua (o el Bilby de Pascua en Australia); huevos pintados, escondidos para encontrarlos más tarde (o colgados de los árboles en Alemania); ropa nueva; comidas familiares; y muchos dulces. Desde el punto de vista religioso, el Domingo de Pascua se dedica a adorar a Jesús, asistir a la iglesia -incluidos los servicios al amanecer-, cantar alabanzas y leer las Escrituras. Los cristianos suelen referirse al Domingo de Pascua como el Domingo de Resurrección para enfatizar la razón de la celebración de este día.
El Domingo de Resurrección se celebra en la primavera de cada año (o en otoño en el hemisferio sur), en marzo o abril (o, en la Iglesia Ortodoxa Oriental, en abril o mayo). La Pascua siempre coincide aproximadamente con la celebración judía de la Pascua, ya que Jesús fue inmolado en Pascua (Lucas 22:15; Juan 13:1; cf. 1 Corintios 5:7) y resucitó tres días después. De hecho, la Pascua se llama a veces Pascha, palabra derivada del hebreo pesach, que significa "Pascua".
El Domingo de Resurrección marca el final de la Semana Santa, el final de la Cuaresma y el último día del Triduo Pascual (que comienza la noche del Jueves Santo y continúa con el Viernes Santo, el Sábado Santo y el Domingo de Resurrección). En el calendario litúrgico, el Domingo de Resurrección marca el comienzo del tiempo pascual, un periodo de 50 días que incluye la octava de Pascua (los ocho primeros días del tiempo pascual), los cinco domingos siguientes, la Ascensión del Señor y el Domingo de Pentecostés. Varias iglesias, incluidas las católicas, celebran desde la Cuaresma hasta Pentecostés. Otras iglesias observan el Domingo de Pascua y posiblemente marcan el Viernes Santo. No es una cuestión de obligación legalista, sino de conciencia: "Uno juzga que un día es superior a otro, otro juzga iguales todos los días. Cada cual esté plenamente convencido según su propio sentir" (Romanos 14:5).
Sea cual sea la fecha en que cae la Pascua, siempre es en domingo. Todos los Evangelios afirman que Jesús resucitó el primer día de la semana (Mateo 28:1; Marcos 16:2; Lucas 24:1; Juan 20:1, 19). Y ese acontecimiento es fundamental para todo lo que creemos como cristianos: "y si Cristo no ha resucitado, vana es entonces nuestra predicación, y vana también la fe de ustedes. . . . y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes es falsa; todavía están en sus pecados" (1 Corintios 15:14, 17).
La resurrección de Jesús es ciertamente digna de ser celebrada (ver 1 Corintios 15). Ya sea que usemos el término Pascua, Día de la Resurrección o Pascha, es bueno conmemorar el acontecimiento que selló nuestra salvación y cambió el mundo para siempre.
Sea cual sea la forma que elijamos para celebrar el Domingo de Resurrección, no debemos permitir que la diversión y los juegos asociados distraigan nuestra atención de lo que realmente es el día: la gloriosa resurrección de Jesús de entre los muertos. Debemos celebrar a Cristo todos los días, no solo el Domingo de Resurrección. Él es la Resurrección y la Vida (Juan 11:25), y es digno de alabanza más de una vez al año.
Para aprender más sobre cómo la muerte y resurrección de Jesús proveyeron para nuestra salvación, por favor lea nuestro artículo "¿Qué significa aceptar a Jesús como su Salvador personal?"
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¿Qué es el Domingo de Pascua?
