Pregunta
¿Qué significa que Dios enjugará toda lágrima (Apocalipsis 21:4)?
Respuesta
Apocalipsis 21:4 contiene una promesa de restauración, en la que el mundo actual desaparecerá y Dios instaurará una nueva realidad. El versículo afirma: "Él enjugará toda lágrima de sus ojos, y ya no habrá muerte, ni habrá más duelo, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas han pasado". Algunos tachan estas palabras de meras ilusiones, pero los creyentes encuentran consuelo en esta promesa en medio del quebranto actual. El hecho de que Dios enjugará un día toda lágrima nos da esperanza.
La promesa de que Dios enjugará toda lágrima va acompañada de otras cosas que existen en nuestro mundo actual y que serán erradicadas en el mundo venidero: "Él les secará toda lágrima de los ojos, y no habrá más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas esas cosas ya no existirán más" (Apocalipsis 21:4, NTV). Tampoco habrá "más mar" (versículo 1, NBLA) ni "más maldición" (Apocalipsis 22:3, NBLA). En lugar de esas seis cosas, la tierra nueva tendrá la Nueva Jerusalén, la presencia y la gloria de Dios, y el gozo eterno de los santos. Como Dios enjuga todas las lágrimas, también se enjuga todo lo que ocasionó las lágrimas.
La vida en este mundo es una mezcla de bien y mal, que nos obliga a lidiar con diversas tragedias. Hay lágrimas, tristeza, dolor, sufrimiento, enfermedad, muerte, accidentes y calamidades naturales. Toda la creación gime, esperando la plena liberación de Dios (Romanos 8:22). La naturaleza caída de nuestro mundo es evidente, y todo el mundo ha experimentado alguna forma de sufrimiento. De hecho, muchos creyentes y escépticos consideran el problema del mal como la mayor objeción a la existencia de Dios o, al menos, a Su bondad.
Sin embargo, los cristianos no están sin esperanza, como proclama Apocalipsis 21:4. Del mismo modo que Dios sometió a la creación a una maldición cuando Adán pecó, lo restaurará todo y establecerá un nuevo orden de vida por medio de Jesús. Como escribió el difunto Timothy Keller: "La visión bíblica de las cosas es la resurrección: no un futuro que es solo un consuelo por la vida que nunca tuvimos, sino una restauración de la vida que siempre quisiste. Esto significa que cada cosa horrible que haya sucedido no solo se deshará y reparará, sino que de algún modo hará que la gloria y el gozo finales sean aún mayores" (The Reason for God: Belief in an Age of Skepticism, Dutton, 2008, p. 32).
Además, podemos confiar en que el carácter de Dios permanece intacto a pesar del sufrimiento y las lágrimas, porque Él asumió voluntariamente nuestro sufrimiento por nuestro bien. Una vez más, Timothy Keller ofrece una valiosa perspectiva:
Si volvemos a hacernos la pregunta "¿Por qué permite Dios que continúen el mal y el sufrimiento?" y nos fijamos en la cruz de Jesús, seguimos sin saber cuál es la respuesta. Sin embargo, ahora sabemos cuál no es la respuesta. No puede ser que no nos ame. No puede ser que sea indiferente o se desentienda de nuestra condición. Dios se toma tan en serio nuestra miseria y nuestro sufrimiento que estuvo dispuesto a asumirlos. (Ibid., p. 30)
Además, la existencia del mal no refuta necesariamente la existencia de Dios. De hecho, ha llevado a algunos destacados escépticos a considerar al menos la idea de un Ser Supremo. C. S. Lewis es un ejemplo. En una de sus conocidas citas, Lewis plantea lo siguiente: "Mi argumento contra Dios era que el universo parecía tan cruel e injusto. ¿Pero cómo había llegado yo a esta idea de “justo” e “injusto”? . . . ¿Con qué comparaba este universo cuando lo llamaba injusto?". (Mere Christianity, HarperCollins Publishers, 2023, p. 31).
Además, solo podemos hablar de sufrimiento cruel e injusto si existe un "debe ser" objetivo, una forma racional en que los humanos deben vivir que esté por encima de ellos. Sin normas, no puede haber desviación. Pero si no existe Dios, entonces el mundo surgió por azar y todas las normas que tenemos son, en última instancia, creadas por el hombre y están sujetas a cambios. ¿Por qué hablamos entonces del bien y del mal como realidades evidentes y objetivas? Algunos podrían apelar a un dios deísta, pero eso no proporciona una explicación satisfactoria. ¿Por qué iba un Ser a pasar por el proceso de crear un universo y establecer normas para sus creaciones, solo para abandonar el universo a sus propios caprichos?
Por consiguiente, se puede argumentar que la presencia del quebrantamiento y del mal sirve como prueba de la existencia del Dios cristiano, sobre todo si se tiene en cuenta que la metanarrativa cristiana reconoce la dura realidad del sufrimiento y sus complejidades. La cruz se erige entonces como testimonio del carácter de Dios. De hecho, muchas personas han depositado su confianza en Cristo precisamente a causa del sufrimiento, no a pesar de él.
Pero, ¿cómo podemos estar seguros de que la esperanza que se expresa en Apocalipsis 21:4 no es una mera ilusión? La respuesta está en la resurrección. La veracidad del cristianismo depende de esta afirmación histórica (1 Corintios 15:14). Puesto que Jesús resucitó de entre los muertos, nuestra esperanza se asienta sobre una base sólida. "Ciertamente Él llevó nuestras enfermedades, y cargó con nuestros dolores" (Isaías 53:4a, NBLA). Y ciertamente ha resucitado.
"El llanto podrá durar toda la noche, pero con la mañana llega la alegría" (Salmo 30:5b, NTV). La noche de este mundo trae tristeza, pero el amanecer se acerca. Cuando amanezca ese nuevo día, Dios enjugará todas las lágrimas y, en palabras de Esther Kerr Rusthoi: "Todo valdrá la pena cuando veamos a Jesús" (Singspiration, 1969).
English
¿Qué significa que Dios enjugará toda lágrima (Apocalipsis 21:4)?
